Presentamos un proyecto de ley que tiene como propósito la creación de un Programa Provincial de Prevención, Concientización y Protocolos de Actuación frente a Emergencias Alérgicas e Inmunológicas en Instituciones Educativas.
Tal como explican los profesionales de la salud, las enfermedades alérgicas e inmunológicas constituyen actualmente uno de los problemas de salud más frecuentes a nivel mundial, con un impacto creciente en la calidad de vida de niños, niñas y adolescentes. Diversos estudios han demostrado que las alergias alimentarias, respiratorias, cutáneas otras reacciones mediadas por mecanismos inmunológicos no solo han aumentado en prevalencia en las últimas décadas, sino que también representan una de las principales causas de consultas pediátricas y de emergencias escolares.
En este contexto, resulta fundamental que las instituciones educativas cuenten con protocolos claros y actualizados de actuación, que permitan a docentes, directivos y personal auxiliar identificar los síntomas tempranos, aplicar medidas de primeros auxilios y solicitar asistencia médica especializada en tiempo y forma. La ausencia de estos protocolos incrementa el riesgo de complicaciones graves y expone a las familias y a la comunidad educativa a situaciones de angustia y vulnerabilidad.
Por otra parte, la prevención y la concientización cumplen un rol esencial. A través de campañas educativas, jornadas de información y la difusión de hábitos de cuidado ambiental, es posible reducir factores de riesgo, evitar desencadenantes y generar un entorno escolar más seguro para quienes padecen estas patologías.
Las dos principales causas de cuadros graves y de emergencia en la edad escolar a nivel mundial son la anafilaxia (principalmente por alimentos) y las crisis asmáticas de predominio alérgico. Estas patologías concentran la mayor carga de urgencias y representan el eje sobre el cual debe girar la educación y prevención en el ámbito escolar.
La alergia alimentaria requiere reforzar la educación en comedores escolares y la lectura de etiquetas, para prevenir exposición a desencadenantes. El asma alérgico debe abordarse con capacitación sobre reconocimiento de síntomas y disponibilidad de medicación de rescate. Ambas enfermedades impactan fuertemente en la calidad de vida de los niños y sus familias, generan ausentismo escolar, aumentan el gasto en salud y exponen a los pacientes a situaciones de discriminación y bullying.
El entrenamiento físico adecuado y supervisado forma parte del tratamiento integral del asma alérgico. Su inclusión en la educación escolar permite mejorar el control de la enfermedad, reducir el ausentismo y favorecer la inclusión plena de los estudiantes en actividades deportivas y recreativas. Capacitar al personal educativo para reconocer la importancia de la actividad física segura y del plan de acción individual en cada alumno contribuirá a mejorar la calidad de vida y disminuir la carga de la enfermedad.
La creación de un registro provincial de pacientes permitirá no solo mejorar la respuesta preventiva y la seguridad en emergencias, sino también generar datos epidemiológicos sobre la prevalencia de estas enfermedades en edades vulnerables. Esto es fundamental para diseñar políticas públicas más efectivas, asignar recursos con equidad y planificar capacitaciones según la realidad local.











